Adriana no va a empezar con buen pie su mandato y es que tiene varios frentes abiertos: por un lado tiene que hacer caso a los favores que le piden todos los que han depositado su voto a su favor y por otro afrontar la falta de apoyo por parte de su amiga Elena y del Doctor Mateo.
Su hermano Abel, además, llegará con sus hijos a San Martín del Sella con un problema grave que se suma a la carga de Adriana. Su mujer desconoce que Abel se ha llevado a sus hijos y la separación se debe a que ella se ha enterado de su última infidelidad. ¿Podrá Adriana arreglar la situación?
Alfredo y Elena viven ajenos al sufrimiento de Santiago, que no soporta ver cómo se regalan cariño delante de él mientras no consigue reprimir sus sentimientos hacia ella. El confidente será el Doctor Mateo, que le aconsejará que intente no coincidir con Elena, pero no es nada fácil.