Gleicy, una mujer bellísima, está casada con Armando, que tiene una tienda de abarrotes y es un fanático del Flamengo, un equipo de futbol. Mientras él trabaja, ella chatea con distintos hombres en la computadora y se muestra a ellos en ropa interior y con una máscara.

Edimilson es amigo de Armando y le cuenta que Gleicy lo está traicionando. Armando interroga a Gleicy pero no saca nada en claro por lo que consigue que un amigo instale un programa espía en la computadora de Gleicy. Entonces descubre que su esposa tiene amantes virtuales y se hace pasar por un admirador para ver hasta dónde está dispuesta a llegar y hace una cita para verla en persona.

Ella acepta y queda en verlo a la hora de la final del partido del Flamengo. Armando no la deja quedarse en casa y la lleva al estadio con él. Ella se queja, pero él le amenaza con un arma y le exige que se calle. Armando piensa matar a su esposa después del partido, pero cuando su equipo resulta hexacampeón, él se siente eufórico y decide perdonar a Gleicy, pues, a fin de cuentas, sólo es un cornudo virtual.