Jaime y Maysa se emocionan juntos al reencontrarse y la artista avisa a sus padres que se llevará a su hijo con ella a Europa. Ella le explica cómo será su vida en el país y recuerda el inicio de su matrimonio con André.
Maysa canta en París y es muy aplaudida, un éxito que celebra con Miguel, al que llega a llamar "cobarde" pero con el que también tendrá un beso apasionado. Aún así, prefiere mantenerse lejos de los problemas y le pide que se vaya.
Los problemas no desaparecen para la cantante, que se debate entre el recuerdo, los conflictos con su hijo Jaime, ya en el internado y las discusiones con Miguel, que cuando regresa la encontrará drogada en el cuarto, casi desmayada.