Loli, junto con Claudia y Ernesto acuden a una exposición de arte abstracto en la que conocen a Salvador, un muy conocido de Kapuchonsky y además un experto en la materia según dice. Loli, con ganas de demostrarle a Claudia que ella también puede ligar y seducir a un hombre culto y elegante intenta captar continuamente su atención, situación que a Claudia también le provocará celos e intentará seducir a Salvador. Pero la única finalidad por la que Salvador les da coba es porque quiere venderles el cuadro del autor.
Mientras las mujeres de la casa intentan seducir a Salvador para demostrarle a la otra que ella también puede, los hombres también están involucrados en el tema del arte abstracto, y es que Ernesto y Mariano tienen un plan entre manos. Ambos pretenden comprar el cuadro para después poder venderlo a un mayor precio y sacar beneficio de ello. Pero por una confusión tendrán que hacerse pasar por una pareja homosexual para firmar el acuerdo para la compra del cuadro.
En el colegio, los adolescentes tienen que realizar un estudio sociológico en una zona marginal de Madrid. Aitana, Laura, Rafa, Cristian y Poncho son el grupo que desarrollará el trabajo. En un primer momento se elige a Cristian como líder del grupo, pero después de las meteduras de pata en el barrio y algún que otro problemilla, todos llegan a la conclusión de que el más indicado para realizar la investigación como Dios manda es Rafa.
Rafa ayudará a sus compañeros a que se metan más en el papel para no tener problemas añadidos a partir de ese momento intentando que hablen más la jerga del barrio con una forma de hablar más macarra y que no parezcan los pijos de urbanización cara que son. Además les enseña la forma de pensar en un barrio y que todo allí se basa en el compañerismo entre las personas del barrio.