Álex consigue acceder a Sperk para obtener muestras del BN23. Si logran analizar este compuesto, podrá conocer su finalidad. Mientras tanto, Lara tiene una reunión con Amalia Sigüenza, la Ministra de Sanidad que se encuentra detrás de esta trama. Sin embargo, la política la convence de que Rodrigo no era más que un corrupto. Desengañada, Lara toma la decisión de dejar la investigación.
Por otro lado, Blanca echa de casa a Álex cuando descubre su infidelidad. Ciertamente, el neurocirujano se ve afectado, pero también siente libertad para poder tener una relación con Marian. La viuda de Rodrigo acepta que Álex se mude con ellos, pero se encuentran frente a la oposición de su hija adolescente.
Los Meyer se enteran de que Álex está ayudando a Lara en la investigación y, aún peor, descubren que el neurocirujano tiene memorias del corazón de Rodrigo. Padre e hijo idean un plan para terminar con ellos definitivamente.