Hay muchas cosas que no han cambiado en las galerías, pero hay más niños correteando por el taller y sus alrededores, como los de Pedro y Rita y algunos otros que vienen de visita a la gran empresa, como la hija de Cristina Otegui.
Ana ha decidido parar un poco y no viajar como acostumbraba estos últimos años. Va a seguir dándolo todo en lo suyo, pero no quiere estar todo el tiempo de aquí para allá y quiere estar con su hijo.
La diseñadora va a intentar acercar la moda a las personas humildes, para que puedan tener acceso a las últimas tendencias. En esa vuelta se reencontrará con Cristina y sus hijos querrán jugar juntos. ¿Cómo reaccionarán las enemigas después de todo lo que ha pasado entre ellas?